Con el verano llegan muchas cosas, acontecimientos y personas, pero desofortunadamente así como llegan se van.
Ayer en la iglesia, último día de septiembre, en la iglesia Santa Cruz; al finalizar la celebración eucarística en honor a la Virgen de Coromoto, despedíamos con emotivo y caluroso aplauso al sacerdote nicaragüense Ronald Cerda. Así como estaba abarrotado el templo, del mismo modo se percibía el enorme agradecimiento y cariño al sacerdote quien ha compartido con nosotros todo el mes. Hoy ya retorna a Roma para continuar con sus estudios.
«Padre Ronald te deseo lo mejor en tus estudios, sigue amando a la Iglesia, ora por nosotros ante los pies de San Pedro , que aquí en Galicia nosotros te encomendaremos ante el apóstol Santiago. Espero hayas disfrutado tu estancia con nosotros y recuerda que aquí tienes tu casa. Te estoy agradecido enormemente»
Fueron estas las palabras fraternas que el párroco expresó al «cura nica» mientras lo despedía con abrazo sacerdotal.