Nació en Alejandría en el año285.
Fallece en esta ciudad, en el año 303.
Mártir cristiana del siglo IV.
Su culto ya tuvo gran difusión el el siglo IV.
Está incluida en el grupo de Santa Bárbara, Santa Margarita… Santas auxiliadoras.
Su primer Santuario y allí se encuentra su tumba.
Sus atributos: palma, rueda rapada, espada…
Patrona de estudiantes femeninas, oficios relacionados con las ruedas: ciclistas, molineros, hilanderas, carreteros…).
Dotada de gran inteligencia, hizo grandes estudios.
Una noche se le apareció Cristo y decidió consagrarse su vida.
Magencio en el siglo III, acudió a Alejandría para presidir una fiesta pagana y ordenó a todos que hiciesen ofrendas a los dioses. Ella entró en el templo pero en vez de adorsrlos hizo la señal de la cruz.
Esto provocó la iro del emperador y decidió que fuese azotada. Fue a visitarla la emperatriz con su amigo Porfirio que también se convirtió y otros 200 soldados.
El emperador Magencio ordenó que fuer torturado con unas ruedas guarnecidas con cuchillas afiladas que al tocar el cuerpo de Catalina se rompen y ella salió ilesa.
La emperatriz que también pidió por ella, fue decapitada , Porfirio y los 200 soldados.
Al final, Catalina fue decapitada.
Sus reliquias fueron trasladados por los ángeles.
Desde el siglo X se extendió enormemente la peregrinación allí sobre todo por los que se dirigían a Tierra Santa
Sobre todo Francia en el siglo XII por los Cruzados.
La rueda que se utilizó para su suplicio aparece con mucha frecuencia junto a su lado.
El monasterio fue construido por el Emperador Justiniano, justamente en el lugar donde Moisés vio arder la zarza.
Durante 6 siglos fue objeto de devoción muy popular.
En Francia hasta el siglo XVII fue fiesta de precepto.
25 noviembre, 2019
Lectura del santo evangelio según san Lucas 21,1-4
En aquel tiempo, alzando Jesús los ojos, vio unos ricos que echaban donativos en el arca de las ofrendas; vio también una viuda pobre que echaba dos centavos, y dijo: «Sabed que esa pobre viuda ha echado más que nadie, porque todos los demás han echado de lo que les sobra, pero ella, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir.»
Palabra del Señor. Gloria a Ti, Señor Jesús.
Meditación
El elogio de Jesús a la viuda pobre que echa dos reales en el arca de las ofrendas se hace una oportunidad para enseñar el verdadero valor del compartir desde lo que se tiene para vivir y no desde lo que sobra.
Al llamar la atención de los discípulos hacía el gesto de la viuda, Jesús nos enseña, en primer lugar, la confianza en la providencia de Dios que abre sus manos a favor de sus hijos. Tener confianza en la Divina Providencia es saber que todo está en las manos de Dios y, realmente, esto se convierte en fuente de sabiduría y libertad, de gozo y confianza. Jesucristo nos explicó el obrar de la Providencia: “No anden tan preocupados ni digan: ¿tendremos alimento? ¿qué beberemos?, o ¿tendremos ropas para vestirnos? Los que no conocen a Dios se afanan por eso, pero el Padre del Cielo, Padre de ustedes, sabe que necesitan todo eso”(Mt. 6, 31-32).
La viuda se desprende de lo que tenía para vivir porque tiene como intuición el llamado que hace el libro del Deuteronomio: “abrirás tu mano a tu hermano, al necesitado y al pobre de tu tierra”. (Dt 15,11). Así dar limosna era considerada una “obra buena” que manifestaba que todos los dones pertenecen a Dios y que estamos llamados a administrarlos. Para la comunidad cristiana la caridad es un imperativo: “ámense los unos a los otros como yo los he amado”. Esa caridad se concreta en el compartir con los otros lo que hemos recibido de Dios. Lo expresa San Pablo: “Mirad: el que siembra con mezquindad, cosechará también con mezquindad; el que siembra en abundancia, cosechará también en abundancia. Cada cual dé según el dictamen de su corazón, no de mala gana ni forzado, pues: Dios ama al que da con alegría. Y poderoso es Dios para colmaros de toda gracia a fin de que teniendo, siempre y en todo, todo lo necesario, tengáis aún sobrante para toda obra buena. Como está escrito: Repartió a manos llenas; dio a los pobres; su justicia permanece eternamente” (2Cor 9, 7-10).
Y así en pocos versículos viene presentada la invitación a ser libres del pensamiento consumista e individualista que centra la felicidad en poseer y acumular, en conseguir y consumir; la verdadera libertad consiste en estar dispuestos a dar de lo que tenemos para vivir, a darnos a nosotros mismos. El discípulo de Cristo recorre el mismo camino de su Maestro que “siendo rico se hizo pobre para enriquecernos a todos”, al Maestro que amándonos hasta el extremo, no dio algo por nosotros sino que se dio a sí mismo, todo él por nuestra salvación; él es la Ofrenda plena y definitiva que nos da la Redención. Es él quien nos enseña que así como nosotros hemos sido bendecidos con toda clase de bendiciones, debemos vivir la experiencia continua de la solidaridad fraterna contribuyendo a dignificar la vida de los hermanos. Nunca dar de lo que sobra para autopromocionarnos, presentándonos como buenos; mejor es estar dispuestos a dar de lo que tenemos para vivir.
P. John Jaime Ramírez Feria
En la capilla de San Pelayo de Montrove ha comenzado -como cada año por estas fechas- la campaña de Navidad.
Siempre se han mostrado los vecinos de Montrove muy generosos en cualquier acción en la que Cáritas parroquial ha solicitado su colaboración. En esta ocasión se ha lanzado una campaña de sensibilización en la que se anima a compartir alimentos de primera necesidad no perecederos, productos de higiene, alimentos infantiles, pañales y juguetes nuevos a estrenar preferentemente didácticos y educativos.
Nos invitan a que llevemos a la capilla los productos que queremos donar y aquellas personas que no pueden desplazarse no tienen más que indicarlo y pasaran a recogerlo a su domicilio.
Confiamos en que este año no decaiga la solidaridad y que podamos contribuir a que la
Navidad pueda ser celebrada en todas las mesas.